Pongamos el siguiente ejemplo. Usted entra a una joyería y el empleado le comenta que puede tomar lo que guste y no pagarlo en un lapso de 10 segundos, con la única condición de usar una venda en los ojos durante este tiempo y salir del lugar. Esto no es una tarea sencilla, es prácticamente imposible lograrlo, no dudamos que usted pueda agarrar algún objeto en este tiempo y salir, pero, ¿Se compararía la cantidad de objetos tomados si no tuviese puesta la venda en los ojos? El valor sería calculado en una gran suma de dinero y esto serian perdidas para el negocio. De esta forma es que funciona un generador de neblina antirrobo para seguridad activa, los cañones de estos equipos expulsan una neblina o humo no toxica que cubre el lugar en segundos provocando que los intrusos no sean capaces de observar lo que esta a su alrededor, retrasando, evitando o aminorando las agresiones en la zona. El factor sorpresa, la velocidad y potencia del disparo serán nuestros aliados para que estas acciones sean repelidas. Entonces retomemos la pregunta inicial. ¿Por qué instalar un generador de neblina antirrobo? Porque no se roba lo que no se puede ver. Integrado a un sistema de alarma antirrobo tradicional o funcionando en forma autónoma, el generador de niebla es un elemento de disuasión capaz de proteger un ambiente de modo eficaz contra el accionar de los delincuentes, así sean expertos en neutralizar sistemas de seguridad. En apenas segundos el generador crea y esparce de modo sorpresivo una espesa, persistente e impenetrable niebla que reduce rápidamente la visibilidad a unos pocos centímetros. De esta forma, los intrusos pierden la orientación y al encontrarse imposibilitados de operar deben huir con las manos vacías. La niebla generada es totalmente inocua, no tóxica, no deja residuos y permanece en el local protegido durante por lo menos cuarenta y cinco minutos desde el momento de su dispersión.
